En este mundo hay de todo, y lo mismo ocurre con el comercio electrónico, donde existen muchísimas formas de tiendas online, cada una distinta de las otras. De hecho, hay varios modelos de Ecommerce minoristas, entre los que se encuentra el que vamos a profundizar en este insight: el dropshipping.
¿Qué es el dropshipping? Se trata de un modelo de venta online que permite vender productos sin tenerlos en stock, lo que es posible apoyándose en uno o varios proveedores (dropshippers) que se encargan de toda la logística.
Este sistema se ideó en EE.UU. hace más de una década y ha despegado también en Europa en los últimos años. De hecho, se prevé que el tamaño de su mercado global pase de los 162 mil millones de dólares en 2021 hasta los 621 mil millones en 2028, con una CAGR del 20,7% en el periodo 2022-2028. ¹ Actualmente, las principales plataformas de dropshipping son Shopify, Oberlo y Spocket, y en 2021 el número de productos enviados de esta forma ha rozado los 1,9 millones en EE.UU. y algo menos de 500 mil en Europa, el segundo mercado más activo. ²
Concretamente, el proceso de venta con dropshipping es bastante sencillo. Las tiendas reciben pedidos online y luego los transmiten a uno o más proveedores que son los que van a entregar la mercancía al comprador.
Ahora que tenemos claro cómo funciona, lo que nos falta saber es: ¿qué se necesita para hacer dropshipping?
1. Respetar la normativa española sobre el dropshipping.
Los requisitos para cumplir en nuestro país no difieren de los que reglan el comercio electrónico en general, entre los que recordamos: la elección de la forma jurídica de la empresa, la alta como autónomos (salvo las excepciones), la tramitación de la declaración censal en Hacienda y una atenta consulta de las políticas de garantía y devoluciones en España y Europa.
2. Escoger la plataforma de venta adecuada
Una vez que desde el punto de vista normativo esté todo en orden, podemos entrar de lleno en la creación del negocio, empezando por decidir en qué plataforma de venta apoyarnos. Hay dos opciones fundamentales:
¿De qué hay que tener en cuenta para elegir la opción más adecuada? Lo vamos a detallar en el capítulo sucesivo.
3. Identificar uno o más proveedores
Al contrario de lo que ocurría al tiempo de los albores de la web, hoy en día los proveedores especializados en este modelo de intermediación abundan. La mejor táctica para escoger un socio fiable y eficiente es ponernos en contacto con mayoristas especializados, que pueden ofrecernos servicios específicos y a medida para nuestra empresa en este ámbito.
4. Promover el negocio
Las actividades de promoción, todas las iniciativas de marketing en general, constituyen otro aspecto crucial. Para hacer frente a un mercado muy competitivo como lo del comercio electrónico – sobre todo en algunos sectores de productos específicos – invertir en publicidad para aumentar la visibilidad de nuestra tienda online y captar la atención de varios buyer personas puede marcar la diferencia a la hora de hacer crecer nuestro negocio. ¿Algunas sugerencias? Optimizar la web y las actividades de marketing según un enfoque SEO y SEA, supervisar las reseñas de los clientes, diseñar una estrategia de comunicación por correo electrónico y gestionar de forma eficaz los perfiles de redes sociales.
5. Elegir la pasarela de pago
Por último, pero no menos importante, cabe elegir la plataforma a través de la cual vamos a recibir los pagos de nuestros clientes. Aunque la mayoría de los marketplaces ya ofrezcan una solución de cobro, si nos decidimos a vender a través de nuestra propia web, debemos considerar también la opción de integrar un TPV virtual. Se recomienda, sobre todo al principio, aplicar un plan de tarifa cero con costes variables solo sobre el valor de la transacción, para reducir al máximo los costes fijos.
Como cualquier modelo de negocio, el dropshipping tiene sus pros y sus contras. A continuación, vamos a listar en detalle las principales ventajas y desventajas, para comprender si el dropshipping sea la estrategia minorista más adecuada para nuestra empresa.
Dar una respuesta precisa a esta pregunta es difícil, porque también el tipo de actividad comercial es un factor determinante para cuantificar la inversión necesaria. Sin embargo, podemos identificar algunos elementos que hay que tener en cuenta a la hora de calcular los costes.
Sitio web propio o marketplace
La creación de un sitio implica costes de desarrollo y mantenimiento. A menos que tengamos conocimientos específicos sobre el tema, tendremos que contratar a una agencia o a un profesional. Como alternativa, al apoyarse a un marketplace, los costes de creación serán menores o se eliminarán del todo, pero tendremos que renunciar a la personalización que brinda un sitio realizado a medida de nuestras necesidades.
Comisiones de venta
Ya hemos mencionado los costes de la recaudación. Hay muchas fórmulas en el mercado, las que pueden incluir costes de activación, tarifas de plataforma y costes auxiliares en función de la personalización y los servicios de valor añadido. Axerve también conta con una oferta diseñada específicamente para los Ecommerce: echa un vistazo a Axerve Ecommerce Solutions y contacta con nuestro equipo de venta para cualquier duda o pregunta.
El dropshipping puede ser definitivamente un punto de partida para vender online y, una vez que se haya conseguido experiencia y fidelizado una base de clientes, pasar a un comercio electrónico más “tradicional”. Hemos intentado darte todas las herramientas que necesitas para entender pros y contras de este método de venta: ¡ahora te toca a ti!
Global Dropshipping Market Insights, Forecast To 2028 | Market Reports world.
Shopgram, 2021.